¿Qué es una reclamación de cantidad laboral o reclamación de salarios?
La reclamación de cantidad laboral es una demanda judicial que puede realizar cualquier trabajador hacia una empresa. Se trata de una especie de protección legal con la que cuenta todo trabajador en caso de un despido injustificado. Todo trabajador puede hacer uso de este derecho, incluso pasado un año desde el momento en que comenzase a sufrir los dichos impagos. Sin embargo, la ley establece que la reclamación de salarios adeudados solo se puede solicitar de los últimos 12 meses.
Esta medida se recoge en el documento llamado Estatuto de los Trabajadores, donde también puede conocerse el procedimiento a seguir. El procedimiento puede ser corto o largo, y también algo costoso dependiendo de cada caso.
En el siguiente artículo nos centraremos en el procedimiento a seguir ante una reclamación de salario.
Procedimiento de una reclamación de cantidad
- Papeleta de conciliación
La ley establece que como primera medida siempre se trate de llegar a un acuerdo entre ambas partes, ya que esto siempre será más rápido y económico que llegar a un proceso judicial. Para tal fin se debe presentar una papeleta de conciliación ante el Servicio de Mediación Arbitraje y Conciliación en la ciudad habitual en la que resida el empleado y tenga sede la empresa.
En caso de que no sea posible alcanzar un acuerdo, entonces el trabajador puede proceder a verificar la posibilidad de un denominado proceso monitorio.
- Verificar la posibilidad de un proceso monitorio
Llegados a este punto, el trabajador debe verificar si es posible un proceso de reclamación de cantidad rápido y económico, que es el caso del proceso monitorio. Para este proceso no se requiere de procurador ni de abogado.
En primer lugar, el trabajador debe verificar la aplicabilidad de este proceso en su caso, el cual establece que:
- El empresario no debe estar en situación de concurso de acreedores.
- La cantidad reclamada no debe ser superior a 6.000 euros.
- Las reclamaciones deben ser cantidades exigibles, vencidas y de cuantía determinada.
Luego, el trabajador debe presentar un formulario con los datos del deudor (NIF, domicilio fiscal, cuantía y el concepto del reclamo). Además, se debe acompañar de una copia del contrato laboral, los recibos de salario y un informe de vida laboral actualizado. Estos documentos deben presentarse ante un juzgado de lo social.
De proceder, el empresario tiene 10 días para abonar lo adeudado. Si el empresario accede todo quedará archivado y se dará por concluido el procedimiento. De lo contrario, el trabajador tiene 4 días hábiles para demandar un proceso ordinario.
- Seguir un proceso ordinario
Es el proceso más largo y costoso. En este caso se exige la contratación de un procurador y de un abogado por ambas partes. Llegado este momento, puede hacerse uso del Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), en caso de que se declare insolvente el empresario.
Cada situación en un proceso ordinario es distinta, por lo que siempre se recomienda consultar a un abogado especialista en derecho laboral.